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| Sinopsis | David Lightman es un estudiante adolescente fanatizado por la informática, cuya principal afición es entrar en sistemas informáticos ajenos.
Un día, mientras rastrea líneas telefónicas, entra en contacto con un software IA.
Lo que David no sabe es que tras dicha IA se esconde un complejo computador de defensa estadounidense con capacidad para iniciar una auténtica guerra nuclear.
Lo que comienza siendo un simple tonteo sin importancia, acaba convirtiéndose en la cuenta atrás hacia el armageddon nuclear.
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| Crítica | 
Puntuación
del crítico: 8 |
"Juegos de Guerra" es, que duda cabe, la película fetiche de muchos cinéfilos en general y de informáticos en particular.
Película original donde las halla, que fue capaz de predecir acontecimientos, filosofías y puntos de vista antes de que nadie fuese siquiera capaz de imaginarlos.
Una producción que se adelantó a su época, visionaria sin lugar a dudas, que sacó a la luz corrientes de pensamiento hoy en día comunmente aceptadas, pero en aquel momento totalmente desconocidas.
Mucho antes de que la archi-conocida revista "Phrack" iniciase su andadura o de que los términos "hacker", "hacking" y similares comenzasen a ser usados, "Juegos de Guerra" ya los usó en forma conceptual (que no literal).
En "Juegos de Guerra" se dan cita todos los elementos propios de la hoy denominada "Cultura Underground".
Juventud de sus miembros, paranoia generalizada, desconfianza y preocupación hacia las estructuras gubernamentales, manía persecutoria y el placer de acceder a sistemas prohibidos.
Técnicamente daba a conocer al gran público el rastreo de números de teléfono (war-dialer), las puertas traseras (backdoors), la búsqueda de información, el descubrimiento de claves (cracking) y la manipulación de líneas telefónicas (phracking).
Tampoco es de recibo olvidar aspectos tan indisolublemente asociados al pensamiento de los hackers, tales como el estilo derechista de los militares y su obsesión por los secretos, la genialidad del protagonista en contraposición a sus malas notas o las relaciones surgidas con otros expertos y administradores de sistemas.
Y, por supuesto, juguetea con un campo en donde aún queda mucho por explotar: Las inteligencias artificiales (IA).
"Juegos de Guerra" tuvo el mérito, no ya de anticipar un futuro, sino de hacerlo con detalles y sin equivocarse.
Sin embargo, para las nuevas generaciones "Juegos de Guerra" suele ser una película insípida y carente de notoriedad.Algo comprensible, pues los jovenes de ahora han nacido en unos tiempos informatizados, en donde los ordenadores, Internet y la cultura undeground son conceptos usados habitualmente en los medios de comunicación.Se puede afirmar que, los adolescentes y veinteañeros de ahora, se han criado con la informática.
Sin embargo, cuando "Juegos de Guerra" se estrenó, nada de esto existía.Aquellos que ahora superan la treintena, muchos de ellos pertenecientes a la denominada "Generación de los 8 bits" (Spectrum, Amstrad y Commodore), se enfrentaron cara a cara con una película revolucionaria e insólita.
No extraña pues que, para gran parte de ellos, "Juegos de Guerra" sea una obra simbólica, inolvidable y ubicada en un lugar especial de la memoria.
En resumen: Película visionaria y simbólica para todos aquellos que se criaron con los procesadores Z80, los PCs sin discos duros y las disqueteras de 5,25".
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Ficha de Película enviada por RealWimper el 15 de Agosto de 2003 |
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